ANONIMARIO

Descripción

XXVIII Premio Jaén de Poesía
poesía Hiperión, 637
Primera edición: 2012
64 págs.
ISBN 978-84-9002-006-7

David Hernández Sevillano nació en Segovia en 1977, es licenciado en Educación Física, está casado, tiene un hijo y vive desde 2005 en Vegafría, un pequeño pueblo segoviano donde regenta un establecimiento de turismo rural.
Todos sus libros han sido premiados:
En 2007, con Uno y uno no es dos frente al espejo, obtuvo el Premio José María de Los Santos.
En 2008, con Suma de azares, el Villa de Benasque.
En 2009 con el tercero, Razones de más, ganó el Premio Nacional de Poesía Fundación Cultural Miguel Hernández, que fue publicado en la colección Devenir.
En 2010 ganó el XXV Premio de Poesía Hiperión con su obra El peso que nos une.
Con Anonimario ha obtenido en 2012 el Premio Jaén de Poesía.

« A David Hernández Sevillano le interesa la vida y especialmente la naturaleza y la gente que vive acompasada a su latido. Y todo ello sin impostura, con naturalidad. »
Ignacio Sanz

« Su colección de anónimos me ha traído a la cabeza, en otro orden de cosas, el «drama en gente» poessoano, puesto que el autor librera a algunos de los personajes que lo habitan.
Nadie del ancho mundo le es ajeno, a todos, hasta el más insospechado, es capaz de entregar, con afecto y pasión, su verso, qué más da, emocionadamente, emocionadamente, que diría el cholo Vallejo. Con mucho oficio y un dominio proteico de la metáfora, los poemas sorprenden por su precisión, de una naturalidad en su desarrollo poco común. »
Fermín Herrero

« Anonimario se propone desde su poética inicial como una caricia que alivie o entretenga al lector. Una terapia que puede salvar mi alma igualmente. De ahí proviene esa naturalidad con oficio y sentido con que quiere tener la cortesía de la legibilidad con quien lee estos versos. Con ese molde Anonimario hace referencia a esos personajes desconocidos que en la primera parte del libro nos cuentan sus vicisitudes desde la orfandad, el exilio, la muerte, el paso del tiempo, el desamor, la vejez, pero también desde el yo enamorado en algunos casos. Con ingenio y oficio va trazando una cartografía hecha de pequeñas reflexiones que esconden siempre alguna pequeña sorpresa como cierre. A veces deja una clave en un verso perdido con una sucinta reflexión que aquilata el sentido del mismo. Pero con tropos sugerentes que miman el verso desde la métrica del aire o una luz de ginebra, un chaquetón de estrellas. O se han descorrido las cortinas del agua. »
Rafael Morales Barba

« Poeta melancólico y condolido serenamente, que canta el amor con palabra sosegada, ajena a la exaltación. Delicado, melancólico, existencial sin acimez, dulce y verosímil, propio, llega este libro con muy buenos mimbres. Una realidad con mucha promesa llegará con este poeta. Si no me creen lean el estupendo poema Muñecas rusas, que cierra el libro. »
Rafael Morales Barba